Cartajima
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Cartajima en camper
Llegamos a Cartajima casi de casualidad y nos llevamos una grata sorpresa al descubrir Los Murales de Cartajima. Te contamos todo lo que ver, qué hacer, dónde comer, las fiestas y dónde pernoctar si viajas en furgoneta camper o autocaravana.
Un pequeño y encantador pueblo situado en el corazón del Valle del Genal, en la provincia de Málaga. Entre los pueblos de Júzcar y Parauta. Rodeado de grandes montañas y espectaculares paisajes naturales. Este municipio cuenta con apenas 247 habitantes. Es un destino ideal para quienes buscan adentrase en la tranquilidad y la naturaleza que el entorno de este pueblo nos ofrece.
Con sus calles estrechas y casas encaladas que reflejan las huellas de su pasado árabe, Cartajima conserva el encanto de los pueblos blancos andaluces. Además, cuenta con unos 28 murales en sus fachadas que reflejan la tradición y costumbres de este municipio, y que, sin duda, tienes que ver.
Las gentes de este pueblo son extremadamente amables, alegres y serviciales, y si te encuentras a algún vecino del pueblo, se acercan casi a ser guías turísticos, ya que te van indicando los preciosos murales de pintura que recorren sus calles.
Sin duda, Cartajima ha sido un descubrimiento para nosotros. Este pueblo tiene una magia especial que nos ha tocado el corazón, haciéndonos revivir emociones entrañables y transportándonos a los días más felices de nuestra infancia. Es como si, al caminar por sus calles, volviéramos a esos años de inocencia y alegría que, de alguna manera, son los más preciados en la vida de cualquier persona.
Dónde dormir en Cartajima
Pernoctar en furgoneta camper o autocaravana en Cartajima
A la entrada del pueblo, en la Avenida Fernando VII, se encuentra un descampado bastante nivelado, ideal para pernoctar ya que es un lugar tranquilo. Junto a él, se sitúan un parque, unas pistas deportivas y el cementerio.
Además, en su cercanía se encuentra una fuente de agua, así como papeleras y contenedores de basura, lo que hace de este lugar un espacio cómodo para los visitantes como nosotros.
Las coordenadas son: 36.649166, -5.156871
Qué ver en Cartajima
Las callejuelas del pueblo
Os sugerimos un paseo por el casco histórico, donde podrás disfrutar de sus calles empedradas, con un trazado irregular que se adapta a la topografía del lugar. Las casas, encaladas en blanco, dan vida a este pueblo auténtico y lleno de encanto. Su legado andalusí se refleja en muchos de sus detalles, siendo las estrechas calles una de sus rasgos más distintivos.
Recorrer este laberinto de historia y belleza es maravilloso, con rincones que invitan a detenerse y admirar cada detalle. Además iréis encontrando durante el paseo uno de los mayores atractivos del municipio, los murales de Cartajima.
Los Murales de Cartajima
En este pequeño pueblo de poco más de 200 habitantes encontraremos un buen número de murales (más de 20). Estos murales nos cuentan la historia y tradiciones de los habitantes de este pueblo, como de tantos otros, muchas de las cuales ya han caído en desuso.
Para nosotros fue todo un descubrimiento, ya que llegamos al pueblo sin saber nada sobre estos murales y que fueron una grata sorpresa, que hace de Cartajima uno de los imprescindibles para visitar si vienes por el Valle del Genal.
Entre los murales encontraremos una abuela bañando al nieto, hombres trabajando el esparto, mujeres lavando en el río o transportando agua y niños jugando a las canicas entre otros.
Si ya tienes cierta edad, algunos de estos murales te llevarán por unos momentos de vuelta a tu infancia.
Puedes ver un artículo completo sobre los murales en este enlace: Los murales de Cartajima. Aquí encontrarás imágenes de todos los murales que decoran el pueblo e información sobre ellos.
Además, como nos resultó tan llamativa y original esta iniciativa, nos hemos puesto en contacto con las artistas que han llevado a cabo este proyecto y hemos charlado con ellas para que nos cuenten un poco más sobre estos murales.
Iglesia Nuestra Señora del Rosario
La Iglesia de Nuestra Señora del Rosario se encuentra en el centro histórico de Cartajima, en la Calle Iglesia 27, justo frente al Ayuntamiento. Este templo fue construido a principios del siglo XVI, tras la conquista cristiana de la Serranía de Ronda.
A lo largo de su historia, ha sufrido varias reformas, la más reciente a mediados del siglo XX. Originalmente contaba con tres naves, pero hoy solo se conserva una, con una cubierta de madera. En su interior, destacan las imágenes del patrón, San José, y la patrona, la Virgen del Rosario, además del Niño Jesús, la figura más popular, situada en un lateral.
En el exterior, la arquitectura sorprende por su sencillez, con una torre campanario de tres cuerpos, coronada por un tejado piramidal.
Calle Francisco Rodríguez
Aunque Cartajima mantiene la trama islámica de sus calles estrechas y laberínticas, en su casco urbano destaca un conjunto de viviendas con fachadas de estilo dieciochesco, situadas en la calle Francisco Rodríguez.
Estas casas, construidas en el siglo XVIII, reflejan una época de prosperidad, impulsada por el cultivo de la vid y la extracción de mineral de hierro, que abastecía la industria de cañones en Jimena de la Frontera.
Durante este auge económico, la población creció hasta alcanzar los 1,500 habitantes, ganándose el apodo de «Cádiz el Chico».
Mirador del 15
El Mirador del 15, es un área recreativa que está situada a unos 500 metros del casco urbano de la localidad y enclavada en un paraje natural de ensueño desde el que se observan unas vistas panorámicas impresionantes de la Cancha Almola, los Riscos de Cartajima, el propio municipio y una buena parte del Valle del Genal, auténtico pulmón de la provincia de Málaga. Aquí se celebra la Romería del Niño Jesús.
Castaño Arenas
El Castaño Arenas, situado a las afueras de Cartajima, bajando por la Calle Ancha, destaca por su impresionante tamaño. Con 17 metros de altura y un perímetro de más de 7 metros, se le calcula una antigüedad de unos 300 años, según los vecinos.
Su nombre proviene de su antiguo propietario, y es común en Cartajima legar o vender los árboles por separado de la tierra. Ubicado junto al Camino del Molino Real, que conecta con Igualeja, este monumental castaño es un punto de referencia para locales y viajeros.
Los riscos
Se trata de un conjunto de rocas calizas de similares características al Torcal de Antequera, aunque en este caso se extiende apenas por dos kilómetros cuadrados de superficie. La erosión de la lluvia y el viento ha esculpido en estas piedras originales formas que, por capricho de la natualeza, se han transformado en originales esculturas, en un proceso de desgaste durante miles de años.
Se sitúan dentro de la Sierra del Oreganal a unos 1.400 metros sobre el nivel del mar. En el ámbito geográfico, delimitan al norte con la Meseta de Ronda, al este con la Sierra de las Nieves, al sur con Sierra Bermeja y al oeste con el Valle del Guadiaro.
Otros parajes de Cartajima
Las tierras de Cartajima ofrecen un fuerte contraste entre las blancas calizas de la sierra del Oreganal al norte y los montes cubiertos de castaños, encinas y alcornoques, al sur. Tanto la situación que ocupa la población como el trazado de la carretera que recorre la ladera de la sierra del Oreganal, permiten disfrutar de bellas panorámicas de la serranía y, especialmente, del Valle del Genal.
Otros parajes que merecen una visita son las cuevas de Carrión, Charcón Bajo, de la Miguela, de Ronda y de Umbría, entre otros. De igual belleza paisajística, la Canaílla del Lobo y Cepo o las simas de la Hurta y la de Veleño.
Fuentes de Cartajima
Cartajima, aunque es un pueblo pequeño, tiene un valioso patrimonio histórico y cultural, representado en sus fuentes más importantes:
La Fuente del Pilar es de origen árabe y está ubicada a un kilómetro del pueblo. Era usada para dar agua al ganado y como parada para los viajeros.
La Fuente de los Peces está en el camino a Alpandeire. Su agua proviene de un manantial y se utilizaba para el riego, el ganado y el abastecimiento de agua para los vecinos.
La Fuente del Pozo también servía como abrevadero y para recoger agua potable. Los niños solían bañarse en ella en verano.
Fuente Ayón se encuentra a 300 metros del pueblo. Probablemente es de origen medieval y su camino empedrado es de interés turístico.
Piscina Municipal
La piscina de Cartajima es una maravilla escondida en plena Serranía de Ronda. Se encuentra abierta en los meses de verano. Cuentan con vestuarios, solárium, aseos, equipamientos para personas con movilidad reducida y un bar. Dispone también de una zona de césped con sombrillas que dan sombra. El agua está cristalina y fresquita. Además, cuenta con unas vistas impresionantes al Valle del Genal.
Dónde comer en Cartajima
Bar – Restaurante La Piscina
Situado a la entrada del pueblo, junto a la piscina municipal, ofrece una variedad de tapas de martes a viernes. Los fines de semana, se sirven platos de carne, pescado y raciones caseras con productos locales de primera calidad. El servicio, atención y precios son excelentes. Tercio Alhambra Especial + tapa por 2,40€.
Es un bar dogfriendly, el camarero no dudó en traer un cuenco con agua para que Scooby pudiera hidratarse también.
El horario es de 09:30 a cierre de martes a viernes y de 10:30 a cierre los fines de semana.
Pub El Callejón
Ubicado en la calle Padre Francisco Rodríguez Gallego, en pleno centro, cerca de la plaza Virgen del Rosario. Con buena música, un ambiente acogedor y una decoración original, es ideal para tomar un café, una copa, jugar a dardos o futbolín, y disfrutar de tapas frías y montaditos. Abierto de miércoles a domingo desde las 20:30 hasta cierre.
Fiestas de Cartajima
Día de Andalucía (28 febrero)
La Asociación de Mujeres Almola celebra este día con todos los vecinos del municipio que se quieran unir a la celebración del día de la Comunidad.
Semana Santa (De jueves a domingo)
Destaca el “Domingo de Resurrección” como Fiesta de Singularidad Turística Provincial.
La Semana Santa de Cartajima comienza con la misa del Domingo de Ramos, seguida de una procesión con ramas de olivo. El Miércoles Santo, los niños protagonizan un desfile llevando la Cruz del Amor y una imagen pequeña de Nuestro Padre Jesús.
El Jueves Santo, la imagen de Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores recorren las calles, y en la madrugada del Viernes Santo, Jesús porta la cruz en otra procesión. Ese mismo viernes, se celebra el Calvario de Cristo, con una procesión por los campos. Finalmente, a medianoche, las mujeres del pueblo llevan el trono de la Virgen en la emotiva procesión de la Soledad.
El Sábado Santo, los vecinos de Cartajima recogen ramas para decorar el Huerto y las calles. Durante la madrugada, unos talan un chopo mientras otros preparan el Huerto. Al amanecer, el árbol se levanta y se celebra la procesión del «Robo del Niño Jesús», trasladando la imagen desde la iglesia hasta el Huerto.
Al mediodía, tienen lugar las «Cortesías», el encuentro entre la Virgen del Rosario y el Niño en la calle Ancha. Luego, se coloca una figura de Judas en el chopo, que se quema antes de continuar la procesión. Tras la misa, la Semana Santa concluye con una verbena popular.
Romería del Niño Jesús (Primer sábado de junio)
En la romería del Niño Jesús, muchos vecinos de Cartajima se reúnen para disfrutar de un día en el campo. Los festejos comienzan al mediodía, cuando la imagen del Niño Jesús es llevada desde la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario hasta el «Mirador El Quince». Al llegar, entre las 13:30 y 14:00, los asistentes hacen ofrendas al Niño Jesús, que se coloca bajo un gran castaño. La jornada se caracteriza por la convivencia, donde vecinos y amigos comparten comida, juegos y un ambiente festivo. Al atardecer, la imagen es devuelta a la iglesia, acompañada por los participantes.
Fiesta del Rosario (15 de agosto)
Fiestas Patronales del Municipio precedida de la Semana Cultural y continuada por días de fiesta y júbilo.
Desde el Ayuntamiento de la localidad se elabora un amplio programa de actividades que se desarrollan durante todas las jornadas y que están dirigidas a personas de todas las edades. Juegos infantiles, deporte, concursos, exposiciones, música, conciertos, diversos espectáculos artísticos, pasacalles, almuerzos colectivos, fiestas temáticas o verbenas.
Verbena Virgen del Rosario (7 de octubre)
Los actos organizados por el Ayuntamiento de Cartajima comienzan por la tarde con una misa en honor a la Patrona. Después, la Virgen del Rosario es llevada en procesión por las calles, acompañada por los vecinos y la música de la banda.
Al finalizar, se celebra una verbena popular con aperitivos y música en vivo.
El otoño es una época perfecta para visitar Cartajima, cuando su entorno natural muestra una impresionante gama de colores gracias a la caída de las hojas de los castaños.
Tostón día de todos los santos (1 de noviembre)
En esta festividad es tradicional que los vecinos de Cartajima se reúnen para realizar un tostón de castañas que acompañan con licores elaborados de forma artesanal.
Fiesta del Mosto (Último sábado de noviembre)
Verbena popular donde se degusta el mosto realizado por los propios vecinos y el cual es acompañando por platos típicos. Días antes de la cata de mosto, más de quince vecinos aportan muestras de sus vinos, que compiten por ser el mejor de la cosecha. Un jurado de tres personas, que cambia cada año, evalúa aspectos como claridad, olor y sabor para elegir al ganador.
El evento comienza alrededor de la 1 de la tarde, cuando los asistentes pueden degustar el mosto ganador y los demás vinos, usando un jarro adquirido en el lugar. La bebida se acompaña de platos tradicionales del pueblo, y hay stands con productos artesanales. Tras el almuerzo, la fiesta sigue con música en vivo hasta la madrugada.
Otros lugares cercanos que visitar
Parauta
Situado a solo 8 kilómetros de Cartajima. Parauta se ha convertido en un imperdible de los municipios de la zona debido a la ruta del Bosque Encantado de Parauta, que se ha vuelto viral en redes sociales.
No dejes de visitar este pequeño pueblo y hacer la ruta en la que encontrarás todo tipo de seres mitológicos. Es ideal para visitar con niños pequeños.
Júzcar
Otro singular pueblo de la zona que no te puedes perder es Júzcar, a solo 5 kilómetros de Cartajima. Fue conocido por el Pueblo de Los Pitufos. Ahora es conocido como la Aldea Azul, ya que la mayoría de sus casas se encuentran pintadas de este llamativo color.
No tiene el mismo encanto que hace años cuando era el pueblo pitufo, pero aún así, puede ser una opción divertida para ir con los más peques.
